La salud como un producto de consumo es una realidad que ya está consolidada en una sociedad como la actual. Sin embargo, esta alianza resulta desaconsejable y peligrosa. No se trata de negar la importancia de la difusión de los beneficiosos consejos y noticias que hoy los medios de comunicación ponen al alcance de todos, sino de advertir que el propósito económico, que incluye también la difusión de la falacia o del error, puede ser ajeno al bienestar deseable de la población.
Fuente: Carlos Gherardi (Médico, Director del Comité de Ética del Hospital de Clínicas, UBA),Clarín (Argentina), 7 de enero de 2009.
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http://www.boletinfarmacos.org/022009/etica_y_derecho_generales.asp#Medicina, artículo de consumo
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